GRAN ACUERDO EN LA POLICÍA LOCAL
GRAN ACUERDO EN LA POLICÍA LOCAL
¿Preacuerdo acordado con antelación con algún sindicato? ¿Mero maquillaje, de cara a ciertos votantes de ZeC? ¿Reestructuración a cambio de iniciar negociaciones inciertas sobre el calendario?
Como ya se ha encargado ZeC de anunciar, a bombo y platillo, en la prensa, el pasado miércoles 14 de febrero, día de San Valentín, se firmó un preacuerdo entre varios sindicatos (CSL, CSIF, CCOO y STAZ) y el Equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Zaragoza en el que, básicamente, se aceptaban todas las reformas y cambios en la estructura de la Policía Local de Zaragoza exigidos por la Concejala Elena Giner, a cambio de la mera expectativa de reiniciar la negociación de un nuevo calendario para alguna unidad de policía.
OSTA, UGT y CGT no hemos firmado este acuerdo. Tres sindicatos de los siete con representación entre la plantilla no hemos apoyado este “gran” acuerdo. De ninguna manera OSTA podía aceptar este documento, ni en el fondo, ni en las formas.
Previamente a este acuerdo, OSTA firmó una propuesta, junto con toda la representación sindical en el Ayto. de Zaragoza, en la que se solicitaba un nuevo calendario para los distintos sectores, así como para la unidad de motoristas, y en la que los sindicatos aceptábamos algunos cambios, como la reordenación de los sectores, (que se planteaba como algo provisional ante la falta de efectivos), y la integración de la UPSV (Radar) en motoristas de forma definitiva, igualmente por la carencia de personal, en este caso, de mandos intermedios.
Después de esta petición, la Concejala Delegada de Policía Local nos fue citando a cada sindicato, de manera informal y por separado, para decirnos que hablar de cambios en el calendario de los policías ya no entraba en sus planes, y que a cambio de reiniciar cualquier negociación sobre el calendario había que incluir en ésta, la flexibilidad (tema que ya viene recogido en el Pacto Convenio, y que no se ha querido poner en marcha en los últimos años, denegando las peticiones sindicales y de los trabajadores de forma sistemática) y la supresión de vacaciones en el Pilar (anuladas en el 2017, mediante decretazo).
Además, en esta futura pseudo negociación, teníamos que aceptar un conjunto de reformas imprescindibles que consistían en la supresión de la Unidad de Caballería, el cambio de nombre y vestuario de la UAPO, creación de la Unidad de Mediación, creación de un Comité de ética e iniciar una experiencia piloto de Policía de Proximidad.
OSTA se ratifica en el acuerdo conjunto de los sindicatos y manifestamos que no podíamos avalar, ni la supresión de caballería sin ninguna justificación técnica, (parece ser que estaba motivada por un supuesto maltrato animal), ni los cambios de la UAPO (el objetivo prioritario del Equipo de Gobierno es cambiar el nombre y la uniformidad de esta Unidad, sobre todo, no llevar el pantalón metido en las botas y llevar prendas como el resto de unidades) y mucho menos la creación de unidades nuevas, ya que dado el déficit de personal que hay en algunas de las unidades existentes, vemos prioritario que se cubran esas plazas antes de crear ninguna unidad nueva. Además desde OSTA preguntamos por qué citaba a los sindicatos por separado, cuando había una propuesta conjunta de forma unánime. La Concejala Giner manifestó que solo se trataba de reuniones informales con todos los sindicatos y que nos convocarían a una reunión conjunta para exponer todo esto y poder llegar a un acuerdo.
Parece ser que la Sra. Concejala tuvo mas suerte con otros sindicatos y algunos aceptaron sus condiciones, y así, fuimos convocados para el día 14 de febrero, solamente para ultimar los detalles y oficializar/visualizar un acuerdo que ya tenían casi cerrado con anterioridad, tanto es así que previa a esta convocatoria ya habían citado, a todos los sindicatos, para hablar del calendario cuya negociación estaba vinculada a aceptar las condiciones del Equipo de Gobierno, dando así por hecho el acuerdo.
Desde OSTA consideramos, en cuanto al fondo, que no podemos aceptar las reformas que exige el Equipo de Gobierno, ya que estas son meramente políticas, de cara a la galería, a cambio de una simple expectativa de sentarse y volver a iniciar y negociar, por enésima vez, un calendario, sin ningún compromiso de implantarlo.
Unas medidas que, además, en nada benefician a los ciudadanos, ni a la organización de la Policía Local de Zaragoza, ni mucho menos a los trabajadores por cuyos derechos laborales tenemos la obligación de velar los sindicatos. En estos momentos creemos que es inadmisible la creación de nuevas unidades de dudosa utilidad, cuando hay otras funcionando en precario por la falta de efectivos.
Y, en cuanto a las formas, es lamentable estar más de cuatro horas de teatro-negociación para llegar a un acuerdo, que ya estaba aceptado de antemano por algún sindicato y el equipo de gobierno, representado por la Concejala Delegada de Policía, un asesor y una Jefa de Departamento, todos ellos con amplios conocimientos y experiencia en temas policiales, y muy duchos en cuanto al funcionamiento y la organización de la Policía de Zaragoza, como demostraron durante el desarrollo de la reunión.
Mal acuerdo para la Policía Local. Mero maquillaje.